Titus pide que esta ciudad norteamericana refuerce el programa 287(g) para aumentar la cooperación entre ICE y la policía local en medio de la migración ilegal.
Las Vegas volvió a estar en el centro de atención nacional tras ser incluida en una lista federal de ciudades santuario por presuntamente restringir la aplicación de leyes migratorias. En respuesta, la senadora republicana Robin Titus solicitó que Nevada, especialmente Las Vegas, fortalezca su colaboración con ICE.
Su llamado busca impulsar una política migratoria más estricta en una ciudad donde las tensiones entre seguridad y derechos migratorios están en aumento.
Titus sugiere que las autoridades locales se involucren de forma activa en el programa 287(g), el cual autoriza a los policías a interrogar y detener a inmigrantes bajo custodia con el objetivo de facilitar su deportación. Si bien esta cooperación es opcional, una reciente orden ejecutiva federal ha intensificado la presión, ya que plantea retirar fondos a las denominadas “ciudades santuario”.
Sin embargo, la iniciativa enfrenta resistencia: mientras algunos republicanos la respaldan, la mayoría demócrata en la Legislatura estatal ha avanzado en proyectos que buscan reducir la cooperación con ICE, como la propuesta AB217, que limita el contacto entre escuelas y autoridades migratorias.
La senadora demócrata Selena Torres-Fossett criticó la medida de Titus, señalando que no corresponde a legisladores estatales hacer cumplir leyes federales.
El programa 287(g) permite a las agencias locales firmar acuerdos con ICE para que ciertos oficiales puedan realizar tareas propias de migración, como identificar y retener a personas indocumentadas en centros de detención. Aunque es una herramienta legalmente permitida, su implementación es polémica.
El programa impone costos al gobierno local, como el pago de salarios y la capacitación de agentes, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre su viabilidad. A pesar de que existen incentivos como el Programa SCAAP —que reembolsa parcialmente el gasto por encarcelar a inmigrantes condenados por delitos graves—, muchos consideran que no compensa el impacto fiscal ni los riesgos legales.
De hecho, en 2019, la Policía Metropolitana de Las Vegas (LVMPD) se retiró del 287(g) tras un fallo federal que limitó las detenciones civiles por inmigración. Desde entonces, LVMPD ha mantenido cierta colaboración con ICE, pero fuera del marco de ese programa. El gobernador republicano Joe Lombardo también ha rechazado que Las Vegas sea una ciudad santuario, aunque sigue comprometido con el cumplimiento de la ley federal.