Una marca de cines nacida en Florida está en proceso de reestructuración. Pese a ello, ha confirmado que continuará sus operaciones en el estado.
Conocida por ofrecer una experiencia de cine de lujo con salas tipo lounge y servicio de comida gourmet, Cinemex Holdings USA, conocida como CMX Cinemas, se posicionó como una de las cadenas premium más visibles en Estados Unidos. Ahora, enfrenta un nuevo proceso de reestructuración financiera que pone en duda la sostenibilidad del modelo de cine de alta gama en el país.
Esta cadena de establecimientos anunció, en menos de cinco años, su segunda declaración de bancarrota. A partir de ahora, buscará reestructurar sus operaciones comerciales con el apoyo de un prestamista externo y mejorar su rentabilidad. La compañía fue fundada en Florida en 2017.
Al igual que muchas empresas en quiebra, la cadena se amparó en el Capítulo 11 del Código de Bancarrotas de Estados Unidos. No ha cerrado ninguna sucursal ni despedido personal, pero ha comenzado a buscar inversores o prestamistas interesados en mejorar la rentabilidad del negocio.
Mediante un comunicado, la empresa anunció la decisión: "CMX prevé salir del Subcapítulo V durante la primera parte del tercer trimestre de 2025 y confía en que una reestructuración financiera integral redundará en el mejor interés de CMX, sus accionistas y socios comerciales en general". En contraste, informaron a los clientes y al público en general que continuarán operando con normalidad durante el proceso. Cinemex cuenta con una plantilla de 1,400 trabajadores.
Conocida como la "Ley de Quiebras" de Estados Unidos, esta normativa permite que distintas empresas, organizaciones y corporaciones ajusten sus finanzas para continuar operando mientras reorganizan sus deudas y contratos con los acreedores. A lo largo del proceso, el tribunal supervisa el plan de reestructuración, el cual puede contemplar recortes presupuestarios, cierre de sucursales no rentables y la renegociación de arrendamientos, según el IRS.