Estados Unidos exigiría el pago de esta suma de dinero ya que forman parte de un depósito de seguridad obligatorio. Conoce más del tema aquí.
Estados Unidos exigirá el pago obligatorio de $250 para la mayoría de visas de no inmigrante (B-1, B-2, F y M). Por consiguiente, turistas, estudiantes y trabajadores tendrán que desembolsar esta suma de dinero, destinada a reforzar la seguridad y evitar las estadías prolongadas en territorio norteamericano. ¿Cuándo entrará en vigor? ¿Qué más se sabe del tema? Aquí te comentamos.
Según la información recopilada de Travel And Tour World, esta tarifa entrará en vigor en 2026 en conjunto con la ley presupuestaria de Donald Trump, denominada 'Big Beautiful Bill'. Los nuevos impuestos imponen estrictas condiciones que podrían perjudicar la asequibilidad y acceso para viajeros de países de desarrollo.
Cabe mencionar que, en base en lo emitido por la legislación, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) es responsable de cobrar este cargo adicional en el momento en el que se emita la visa y las tarifas de procesamiento de solicitudes de visa existentes.
La tarifa es reembolsable en circunstancias específicas. Los titulares de las visas de no inmigrante pueden solicitar el reembolso si salen del país dentro de los cinco días posteriores al vencimiento de su visa sin solicitar una extensión de la misma o un cambio en su estatus migratorio, por ejemplo. Lo mismo ocurre con quienes ajusten su estatus a residente permanente legal antes de la fecha de vencimiento de su formulario I-94.
No obstante, es crucial que los titulares presentes documentación que respalde su solicitud de reembolso. De no cumplir con los criterios, la tarifa se retendrá y se transferirá al fondo general del Tesoro de los Estados Unidos.
Travel And Tour World comunica que la visa de turista o negocios (B-1/B-2) cuesta aproximadamente $185. De incluirse los $250 adicionales, además de la tarifa I-94 de $24 y el cargo ESTA de $13, el gasto total asciende a casi $462. Esto agrega una carga financiera considerable, por lo que es necesario planificar el viaje a Estados Unidos con antelación.