Cuidado, inmigrantes de Venezuela en EE. UU.: Trump amenaza con restringir el acceso al SNAP y dejarlos sin alimentos
La propuesta de ley de Donald Trump contempla una disposición que limita el acceso al programa SNAP para ciertos grupos de inmigrantes.
- Atención, venezolanos en EE. UU.: Trump inhabilita el registro para la extensión del TPS e incumple fecha límite
- Desde esta fecha, EE. UU. deportará a los que tengan estas profesiones y enfrentarían complicaciones
La propuesta fiscal del presidente Donald Trump, conocida como la ley 'One Big Beautiful Bill Act', podría modificar drásticamente los requisitos para acceder a los beneficios del programa SNAP. Incluye una medida que excluye a inmigrantes de Venezuela y otros países, lo que afectaría gravemente a las comunidades que dependen de este apoyo. Expertos advierten que la reducción de beneficiarios podría perjudicar a los supermercados locales, que dependen en gran parte de las compras realizadas con estos beneficios.
PUEDES VER: EE. UU. busca el fin del TPS para venezolanos: inmigrantes tienen estas opciones para evitar la deportación
¿Qué cambios trae la Ley One Big Beautiful Bill de Donald Trump?
La nueva normativa establece una cláusula (sección 10108) que impide a varios grupos de inmigrantes, tanto de Venezuela como de otros países, acceder al SNAP. Entre los grupos afectados se encuentran:
- Refugiados, tras eliminarse su inclusión en la Ley de Alimentos y Nutrición de 2008.
- Asilados.
- Víctimas de trata.
- Sobrevivientes de violencia doméstica.
- Personas con libertad condicional humanitaria (por más de un año).
Consecuencias económicas del recorte
Según un estudio del Center for American Progress, cerca de 27 mil minoristas en zonas rurales dependen de clientes que utilizan beneficios del SNAP. De estos, 3721 son supermercados, 994 son tiendas especializadas y 600 son mercados agrícolas. La reducción en el acceso al SNAP tendría un efecto dominó no solo en los ingresos, sino también en el empleo local.
El Commonwealth Fund estima que estos cambios podrían resultar en la pérdida de más de 143,000 empleos en sectores como la agricultura, la venta minorista de alimentos y el procesamiento. La situación es preocupante, ya que muchas familias dependen de estos empleos para su sustento diario.
