USCIS implementará nuevas políticas para revisar los antecedentes penales de los inmigrantes indocumentados, lo que podría afectar su estatus legal en EE. UU.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los EE. UU. (USCIS) ha anunciado recientemente cambios significativos en sus políticas migratorias. Estas modificaciones permitirán una revisión más exhaustiva de los antecedentes penales de los inmigrantes indocumentados que busquen regularizar su estatus.
Con esta medida, USCIS pretende fortalecer la seguridad y la integridad del sistema migratorio, lo que podría afectar las solicitudes de aquellos con antecedentes penales. Los inmigrantes deberán estar más atentos y asegurarse de que no haya registros que comprometan su solicitud.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU. (USCIS) ha anunciado el retorno de políticas más estrictas para investigar y verificar los antecedentes de los solicitantes de asilo y refugio. Esta medida, que entra en vigor de inmediato, tiene como objetivo mejorar la detección de fraudes, amenazas a la seguridad nacional y riesgos a la seguridad pública.
La actualización en el Manual de Políticas de USCIS establece nuevos criterios de entrevista para asilados, refugiados y sus familiares al presentar el Formulario I-485. Esta acción está alineada con la Orden Ejecutiva 14161 del expresidente Trump, destinada a proteger al país de posibles amenazas externas como el terrorismo y otros peligros para la seguridad nacional.
Los antecedentes penales que representan un riesgo para la seguridad nacional de EE. UU. abarcan delitos vinculados al terrorismo, espionaje, traición y actividades subversivas. Asimismo, se consideran amenazas aquellos involucrados en planes destinados a perjudicar la infraestructura esencial o vulnerar la soberanía del país.