El Barcelona está en una caída libre, sin encontrar frenos. El equipo de Quique Setién llegó como líder en la reanudación del fútbol, pero fue tropezando poco a poco. Ahora, por la fecha 33 de LaLiga Santander, solo pudo sacar un empate en casa por 2-2 con el Atlético Madrid.
La obligación era obtener los tres puntos para no permitir que el Real Madrid se aleje en lo más alto de la tabla, objetivo que inician a cumplir a los 11 minutos. Diego Costa logró desviar un buen tiro libre de Lionel Messi en el primer poste, pero en el córner que fue a la misma dirección no pudo y anotó en contra.
No obstante, la paridad llegó rápido. A los 18', el árbitro sancionó como penal a una falta sobre Carrasco y Diego Costa lo ejecutó, sin eficacia. Ter Stegen atajó, aunque el árbitro decidió repetir la acción porque el portero se adelantó y esta vez Saúl Ñíguez se encargó de transformar el gol.
La primera parte ya no trajo más emociones, pero el encuentro no estaba cerrado. A los 50 minutos, Nelson Semedo se proyectó al área del Atlético Madrid y generó un penal, el segundo del encuentro. Las circunstancias eran propicias para que Lionel Messi pueda anotar el deseado gol 700.El delantero argentino se paró frente a Oblak, el temible portero colchonero, pero ni se inmutó y definió con mucha calidad, picando el balón por el centro del arco. Todo era felicidad en el Barcelona, dado que el camino al triunfo era señalado, aunque volvieron a descuidarse.
Nuevamente Carrasco provocó un penal a favor del Atlético Madrid y Saúl Ñíguez no desaprovechó la ocasión para inflar las redes, consumando su doblete. Barcelona intentó sobre el final, pero no encontró los caminos al gol. Se quedarán con 70 puntos y Real Madrid (71) buscará alejarse cuando reciba a Getafe.