La carrera de Kevin-Prince Boateng no ha sido mala, sino que que su principal problema fue la falta de regularidad en sus equipos. A sus 33 años, el atacante ghanés asume un nuevo reto, aunque no en la máxima élite del fútbol en Europa: se convirtió en el flamante nuevo jugador del AC Monza de la Serie B de Italia.
Así lo anunció el propio club el último lunes, despertando gran ilusión en los hinchas. Silvio Berlusconi, el reconocido político, tiene un alto cargo en el Monza y fue quien le dio la bienvenida a la estrella, con la que buscará encabezar el proyecto de cara al ascenso a la Serie A. Tendrá un aporte importante.
Según se pudo conocer, el acuerdo es por una temporada. AC Monza logró subir de tercera a segunda división para la temporada 2020-21, teniendo el claro objetivo de seguir con la histórica escalada. El fin de semana debutaron con un empate 0-0 en casa ante el SPAL y Boateng ayudará a mejorar la producción ofensiva.
La temporada pasada, Kevin-Prince Boateng jugó con la Fiorentina en la Serie A, logrando un gol en 14 apariciones (6 de titular). En invierno llegó a Beşiktaş de Turquía, club en el que jugó 11 encuentros (6 de titular) y celebró en tres ocasiones. La calidad ofensiva del futbolista no está acabada
En enero del 2019, Kevin-Prince Boateng dio el salto del Sassuolo de la Serie A de Italia al Barcelona de España, que buscaba variantes en la ofensiva. La llegada generó mucha sorpresa y no terminó de encajar en el equipo, jugando solo 3 partidos en LaLiga Santander, sin anotar un gol. Se marchó sin pena ni gloria.
La carrera de Kevin-Prince Boateng ha sido muy larga, iniciando su camino en la Bundesliga de Alemania. Hertha Berlín, Borussia Dortmund, Schalke 04 y Eintracht Frankfurt fueron sus equipos ahí, mientras que jugó por Tottenham y Portsmouth en la Premier League. Ya en Italia, Milan, Sassuolo y Fiorentina lo acogieron, en tanto que defendió a Las Palmas y Barcelona en España. Recientemente, jugó en Beşiktaş de Turquía.