Una jugada peligrosa se desarrolló en la final de la Champions League. Kevin De Bruyne intentó construir la pared con su compañero de equipo, pero recibió una fuerte falta por parte de Antonio Rüdiger.
El jugador del Manchester City cayó al campo y fue atendido por el cuerpo médico. En la repetición se apreció que el rostro de Kevin chocó con la humanidad de Antonio.
Rüdiger también cayó al campo, pero se recuperó y pudo continuar en el partido. El árbitro Miguel Mateu amonestó con amarilla al hombre del Chelsea.
Después de varios minutos, los médicos del City señalaron que el jugador no puede continuar. Pep Guardiola decidió que Gabriel Jesus ocupe el lugar de De Bruyne.
Kevin salió del campo con ayuda de los médicos y se dirigió a los camerinos. El City perdió a una de sus principales figuras.