Ciertos jugadores del torneo casero quizá destaquen en sus respectivos clubes pero, como ha dicho el mismísimo Ricardo Gareca, son pocos, casi contados con los dedos de las manos, los que alcanzan realmente el nivel de seleccionados.
En el visor del “Tigre”, sin embargo, figuran algunas opciones a tomar en cuenta en las futuras convocatorias. El aliancista Kevin Quevedo es una de las cartas a jugar. “Está dentro de nuestros planes pero por ahora continuamos observando su evolución. Debe alcanzar cierta regularidad en su equipo”, dijo.
Y como nadie, según lo expresado por Gareca, tiene la convocatoria firmada, Alejandro Duarte deberá luchar a brazo partido por el puesto de arquero en el Lobos BUAP. Lo mismo pasa con el rimense Christopher Olivares, delantero de 19 años que apunta a suplir en breve plazo a Paolo Guerrero.
El volante de la San Martín Jairo Concha, de 19 años, que deleitó con sus habilidades como sparring de la selección mundialista, también es observado al milímetro. Gareca piensa formar la base del futuro del equipo nacional con estos chicos que apuntan, si se lo proponen, a objetivos mayores.