Si algunos pecaminosos impulsos hicieron que en su momento se le cruce por esa alborotada melena dejar el barrio de Matute, hoy esos benditos estímulos han generado que ese discutido cafetero Leonardo Castro saque a relucir un libreto que hasta el momento no lo había aprendido del todo con camiseta de Alianza Lima.
Ayer el técnico de Alianza Lima sorprendió a propios y extraños y mandó desde el vamos a Castro. El volante se ajustó el overol, corrió como maniático por todo el campo, dio un pase magistral de gol a los 68 minutos y cerró una jornada gloriosa -en el epílogo del encuentro (94’)- con un tanto. “Se consiguió un gran resultado. El equipo se paró muy bien dentro del campo y corrió todo lo que tenía que correr. Este gol se lo dedico a Dios y a mi madre que está muy lejos”, mencionó con lágrimas en los ojos.
Asimismo, el blanquiazul expresó: “Le agradezco al profesor Costas la oportunidad de ponerme de titular. Siento que hice un partido excelente, ahora tengo que seguir trabajando para mantener el nivel”.