Reimond Manco grita a los cuatro vientos que ha cambiado. No es el de antes. Su nueva vida en la acogedora Cajamarca, alejada de todas las tentaciones de la capital, le ha permitido dedicarse solamente a jugar, a pensar en fútbol.
Y esa pureza nos ha devuelto al Rompecinturas que se hizo famoso con los Jotitas.
Manco volvió al fútbol. El UTC de Cajamarca tiene el privilegio de gozar con sus exquisiteces técnicas. Las tribunas del estadio Héroes de San Ramón se vienen abajo cada vez que hace un quiebre o da un pase gol para Víctor Guazá o Gianfranco Labarthe.
Su nivel superlativo ha despertado el interés de Alianza Lima y Sporting Cristal. Hasta la “U” lo tiene en agenda. Pero todo hace indicar que el Rei regresará a Matute porque la sangre lo llama. “Me muero por volver a Alianza”, les dice Manco a sus amigos y a la prensa.
El técnico Wilmar Valencia ha dado el visto bueno para que juegue en lugar de Yordy Reyna. Su equipo lo necesita. ¿Susana Cuba romperá su política disciplinaria para ficharlo? Todo hace indicar que sí. El resto solo depende de Reimond, quien tiene que meterse en el corazón del Comando.
EL DATO
Manco se formó como jugador en las divisiones menores de la Academia Deportiva Cantolao, y posteriormente es comprado y pasa a las divisiones menores de Alianza Lima, donde a inicios de la temporada 2007 es promovido al plantel profesional.