Alianza Lima continúa sumergido en una pesadilla llamada Copa Libertadores y no sabe cuándo despertará, luego de volver a decepcionar en el torneo continental, al perder 2-1 ante Fortaleza, por la fecha 3 del grupo F.
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En su visita a Brasil, los blanquiazules volvieron a mostrar un nivel irregular, con un pasaje de rebeldía con el que emparejó transitoriamente el marcador en el complemento, a través de Pablo Lavandeira.
Sin embargo, cuando parecía que Alianza Lima podía buscar el triunfo, una mala decisión del técnico Carlos Bustos trajo abajo toda la esperanza íntima: De manera increíble, el DT sacó a 'Súper Pablo', el autor del gol, y Benítez para poner Valenzuela y Lagos para cerrar, supuestamente, el partido.
Pero aún quedaban 20 minutos para el término del partido y, después de los cambios, Fortaleza se vino encima de los victorianos y volvió a ponerse arriba en el marcador, gracias al tanto del recién ingresado Hércules.
Con este resultado, el equipo íntimo continúa sin puntos en su grupo y quedó al borde de la eliminación de la Copa Libertadores, donde solo le restan tres fechas por jugador (dos en condición de local).
Pero eso no es todo. A esto se suma que Alianza Lima amplió a 26 la mala racha de partidos sin ganar en este torneo. Un panorama que podría seguir creciendo y pudo haberlo evitado si aceptaba -a inicios de temporada- contar con el último peruano campeón en la Copa Libertadores.
Hablamos del gran Beto Da Silva, que tenía contrato con Alianza Lima este año y se integró a la pretemporada íntimo a inicios de años. Pero el club blanquiazul no quiso contar con él y arregló con César Vallejo para prestarlo.
Beto debe ser uno de los jugadores más envidiables del fútbol peruano, porque a su corta edad pudo levantar con Gremio el título continental en 2017, tras vencer en las dos finales a Lanús de Argentina.