El papa Francisco comentó sobre las personas en todo el mundo que no desean recibir la vacuna contra la COVID-19 y aseguró que cuando éramos niños "nos ponían las vacunas y nadie decía ni mu".
Durante una conferencia de prensa en el vuelo de regreso de su viaje a Budapest y Eslovaquia, la máxima autoridad de la Iglesia Católica sostuvo que "es un poco extraño" que ahora la gente no se quiera vacunar cuando "tenemos una larga historia" de vacunaciones como la de la poliomielitis o el sarampión.
Sin embargo, explicó que los antivacunas del coronavirus se han dejado llevar "por la incertidumbre y por la gran diversidad de vacunas, algunas con fama de ser incluso agua destilada".
El papa Francisco aseguró que "en el Vaticano estamos todos vacunados menos un pequeño grupo que estamos estudiando cómo ayudarlos".
Las autoridades sanitarias informaron que, a partir del 13 de setiembre, adultos mayores de 24 años se pueden acercar a los centros de vacunación más cercanos a su hogar para recibir la dosis contra la COVID-19.