Se acabó la pesadilla. Estados Unidos jugó su último partido del Mundial de básquet China 2019 venciendo 87-74 a Polonia y de esta forma, se quedó con el séptimo puesto que sabe a poco.
El ‘Dream Team’ era el favorito para llevarse el título y más si venía de ser el actual bicampeón. Sin embargo, el hecho de no contar con sus figuras de la NBA le terminó costando la corona tras caer en cuartos de final ante Francia.
Los dirigidos por Gregg Popovich cerraron su participación en China 2019 con una victoria teniendo a un inspirado Donovan Mitchell. El joven jugador se mandó con 16 puntos.
Pero ni el triunfo ante los europeos podrá borrar de la mente que el presente Mundial de Básquet quedará marcado como uno de los episodios negros en la historia del deporte norteamericano.
Resulta que desde la creación del Mundial de básquet en 1950, Estados Unidos siempre tuvo buenas campañas al ser potencia en esta disciplina. Pero luego de la caída ante Francia y Serbia, solo le quedó luchar por el séptimo puesto.
La casilla que ocupó Estados Unidos superó el fracaso de Indianápolis 2002, edición en la que fue anfitrión. Incluso las críticas no se hicieron esperar por lo que en una reciente conferencia, el seleccionador tuvo un intercambio de palabras con algunos periodistas.
Para este Mundial, Estados Unidos solo contó con dos jugadores All Star, ellos fueron Kemba Walker (Boston Celtics) y Khris Middleton (Milwaukee Bucks)
Para Tokio 2020, todo hace indicar que Estados Unidos tendrá que llevar a lo mejor de la NBA si quiere quedarse con el oro y no repetir lo sucedido en China 2019.