Peleó por alcanzar sus sueños, no se rindió pese a la adversidad y ahora celebra. Tuvieron que pasar 31 largos meses para que Andy Murray vuelva a ganar un campeonato ATP. Entre lágrimas, con las manos al cielo, recibiendo el cariño del público, así festejo el ex número 1 del mundo la obtención del Torneo de Amberes.
Pese a que todos creíamos que Andy Murray se retiraría del tenis profesional por una delicada lesión a a la cadera, el británico no se rindió, trabajo arduamente para regresar. Y qué manera lo hizo, venciendo a Stan Wawrinka con un doble 6-4.
Precisamente, el punto final de Murray fue muy emotivo, robándose los aplausos de los asistentes. El tenista de 32 años no pudo aguantar las lágrimas y se quebró. Un momento que quedará registrado en la historia.
"Este triunfo significa mucho para mí. Los últimos años han sido muy complicados. He tenido muchos problemas de lesiones. Remontar en una final así ha sido increíble", señaló entre lágrimas Andy Murray, mirando fijamente al público, agradeciendo por su constante apoyo.