La deportación en EE. UU. es un proceso legal mediante el cual el gobierno expulsa a un extranjero del país. ¿Es posible que regreses pronto?
Regresar a Estados Unidos después de una deportación es un proceso complicado que no se limita a abordar un avión y cruzar la frontera. Intentarlo sin la debida autorización puede acarrear serias consecuencias legales, como prohibiciones de varios años para volver a entrar al país legalmente, cargos criminales y otras repercusiones. ¿Qué sanciones enfrentarías?
Volver al país americano tras haber sido deportado implica enfrentar serias consecuencias que deben ser cuidadosamente evaluadas. A continuación, te compartimos todo lo que te puede pasar si deseas volver tras ser expulsado de la tierra de Donald Trump:
Vale resaltar que, si intentas reingresar sin la debida autorización se clasifica como un delito federal, lo que conlleva sanciones severas, incluidas multas significativas y penas de prisión que pueden llegar hasta 20 años, especialmente si la deportación previa estuvo vinculada a actividades delictivas.
Si se detecta a una persona intentando regresar, el gobierno puede reactivar la orden de deportación anterior, lo que resulta en una expulsión inmediata sin la posibilidad de defensa ante un juez. Esta situación se complica aún más, ya que cualquier intento de reingreso ilegal puede perjudicar futuras solicitudes de visa o residencia.
Por último, si se logra ingresar al país americano, pero las autoridades identifican a la persona, existe el riesgo de detención y una nueva deportación sin derecho a apelación.