Tras un largo periodo de incertidumbre, Donald Trump finalmente se pronuncia. El presidente de Estados Unidos reduciría los aranceles a China a este porcentaje.
De acuerdo con Reuters, Donald Trump causó sorpresa al afirmar que considera apropiado reducir los aranceles a China en un 80%. Esta decisión está relacionada con los preparativos para una nueva ronda de negociaciones comerciales en Ginebra y podría implicar un ajuste frente al arancel punitivo del 145% que había impuesto recientemente.
El presidente de Estados Unidos comunicó que esta medida busca presionar a Pekin para que abra su economía a los productos estadounidenses, argumentando que "los mercados cerrados ya no funcionan". En esta nota te comentamos todos los pormenores de esta decisión.
Financial Times señala que antes de mencionar públicamente la posibilidad de un arancel del 80%, Donald Trump había contemplado reducir los gravámenes a menos del 60% como parte de un intento por reactivar el comercio bilateral. Sin embargo, el mes pasado, la imposición de un arancel del 145% sobre productos chinos marcó un giro radical que afectó significativamente a los mercados internacionales.
La nueva cifra planteada por Trump, aunque aún elevada, sugiere una posible flexibilización, ocasionando especulaciones sobre un eventual deshielo comercial, aunque también causó inestabilidad en Wall Street: los futuros del Standard & Poor's, los índices bursátiles más importantes de Estados Unidos, cayeron tras las declaraciones del presidente.
Reuters comenta que, desde su primer mandato, Trump ha sido una figura central en la escalada de las tensiones económicas con China. A lo largo de los últimos años, Washington ha impuesto múltiples rondas de aranceles, con nuevas subidas bajo su actual administración.
Perkin, por su parte, ha respondido con medidas equivalentes, incluyendo restricciones a la exportación de tierras raras y aranceles al 125% a productos estadounidenses, como la soja y el gas natural licuado. En este contexto, las conversaciones que ambos funcionarios podrían llegar a tener en Ginebra se consideran un paso inicial para calmar la disputa que enfrentan.