El delantero del Paris Saint-Germain (PSG), Neymar, se refirió a la polémica pelea que protagonizó junto a Álvaro González en el duelo que sostuvieron ante Olympique de Marsella por la jornada 3 de la Ligue 1.
En esta ocasión, 'Ney' utilizó su cuenta oficial de Instagram y a través de historia y en inglés se manifestó sobre el hecho. Explicó que el motivo del porqué golpeó a González fue porque sabía que los responsables no iban a hacer nada.
"Ayer me rebelé. Me castigaron con una tarjeta roja porque quería pegar a alguien que me ofendió. Pensaba que no podía irme sin hacer algo porque me di cuenta de que los responsables no harían nada, o no darse cuenta o ignorar el hecho. Durante el partido, quería contestar, como siempre, jugando al fútbol. Los hechos demuestran que no tuve éxito, me rebelé", exclamó.
"En nuestro deporte, agresiones, insultos y palabrotas forman parte del juego, de la disputa. No puedes ser cariñoso, entiendo a este chaval en parte, todo forma parte del juego. Pero el racismo y la intolerancia son inaceptables", agregó.
"Soy negro, hijo de un negro, nieto y bisnieto de un negro también. Estoy orgulloso y no me veo como diferente a nadie. Ayer quería que los responbables del partido (árbitros, asistentes) se posicionaran imparcialmente y entender que no hay un lugar para esta actitud prejuiciosa", continuó.
"Reflexionando y viendo toda esta manifestación que ocurrió, me entristece el sentimiento de odio que podemos provocar cuando en el calor del momento 'hablamos mal. ¿Lo debería haber ignorado? Aún no lo sé... hoy, con sangre fría, digo que sí, pero en su momento, cuando mis compañeros y yo preguntamos a los árbitros por ayuda, nos ignoraron, ¡esa es la cosa!", explicó.
"Nosotros, que estamos involucrados en el entretenimiento, necesitamos reflexionar. Una acción llevó y llegó a eso. Acepto mi castigo porque debería haber seguido el camino del fútbol limpio. Espero, por otro lado, que se castigue al infractor también", destacó.
El mensaje continúa y en los demás párrafos señala que busca radicar de plano el racismo. Se trasladó hasta su infancia en donde se auto catalogó de tonto al haberse dejado involucrar en ello.
"Existe el racismo, existe, pero, lo tenemos que parar. ¡Nada más, basta! Este chaval fue tonto, fui tonto también por dejarme involucrar en eso... Aún tengo el privilegio de mantener mi cabeza en alto hoy, pero todos tenemos que reflexionar que no todos los negros y blancos están en la misma condición", mencionó.
"El daño de la confrontación puede ser desastroso para ambos lados, si eres negro o blanco. No quiero y no deberíamos mezclar asuntos, color de piel que no elegimos. Ante Dios, todos somos iguales", añadió.
"Pues... ayer perdí la cabeza en el partido y me faltó sabiduría... estando en el centro de esta situación, ignorar un acto racista no ayudará, ya lo sé, pero pacificar este movimiento antirracista es nuestra obligación para que los menos privilegiados reciban su defensa de forma natural", prosiguió.
"Nos encontraremos pronto y será a mi manera, jugando al fútbol... ¡mantente en paz! ¡mantente en paz! Sabes lo que dijiste... y sé lo que hice. Más amor al mundo", finalizó.