El encuentro entre PSG e Istanbul por la fase de grupos de la Champions League se vio manchado cuando a los 13', el cuarto árbitro, Sebastian Coltescu, utilizó la palabra "negro" para referirse al auxiliar técnico del conjunto turco, Pierre Webó, la cual desencadenó el malestar de ambos equipos y que tuvo como resultado la suspensión del partido.
Este lamentable hecho ha generado el repudio del mundo deportivo hacia el juez rumano por aquel condenable gesto. Sin embargo, según declaraciones recogidas por "ProSport", Coltescu se habría comunicado con su familia, a quien le negó ser racista.
"Solo trato de ser bueno. No voy a leer ningún sitio de prensa estos días. ¡Cualquiera que me conozca sabe que no soy racista! Al menos, eso espero", habría confesado el polémico colegiado a través de uno de sus allegados.
Así mismo, Ovidiu Hategan, árbitro principal del encuentro, señaló estar a la espera del anuncio de la UEFA. "No podemos hacer ninguna declaración, primero debemos hablar con la UEFA. Normalmente, te respondería, pero esta noche no puedo. Evidentemente, estamos desolados, pero respeten nuestro silencio y entiendan la situación", declaró para "Europe1.fr".
Por otra parte, el Ministro de Deportes rumano, Ionut Stroe, no dejará pasar por alto este acontecimiento. "Pido disculpas en nombre del deporte rumano por este incidente desafortunado. Condenamos con firmeza cualquier tipo de expresión o declaración que pueda ser considerada racista o discriminatoria".
El choque entre el Paris Saint Germain y el Istanbul por la última jornada de la fase de grupos de la Champions League se reanudará hoy (12:55 p.m.), con el fin de definir al primer y segundo lugar del grupo H que disputarán los octavos de final.