Todavía no es Halloween, pero Pedro Aquino entró a la cancha del Hard Rock Stadium disfrazado de Paolo Guerrero y clavó dos golazos, el primero de ellos solo a los 44 segundos después de pisar el césped.
Y pensar que estos goles casi no se producen debido a que Ricardo Gareca pensó dos veces antes de permitirle el ingreso. Recién a los 73’ le dio el “ok” en lugar de Renato Tapia y, ni corto ni perezoso, acompañó un ataque y definió de forma magistral tras una perfecta asistencia de Edison Flores
Su doblete fue una demostración que también posee magia en sus botines porque dejó sin cintura a Jeraldino en el área y la clavó en un lado inalcanzable para el arquero De Paul.
“La confianza de mis compañeros y del profesor Gareca me hacen un mejor jugador. Las oportunidades hay que aprovecharlas y hoy demostré mis ganas. Agradezco a mi familia y a toda esa gente que me apoya”, sostuvo Aquino feliz.