La rápida propagación de la nueva variante Ómicron ha llevado a que las personas recurran angustiadas a las pruebas de COVID-19. La situación que se vive por la pandemia ha ocasionado la escasez de estos insumos en todo el mundo y a que algunos gobiernos empiecen a adoptar medidas.
Las largas filas de espera para hacerse pruebas COVID no es una situación que sólo se presente en México, sino que corresponde al desabasto que enfrenta el mundo ante el avance de la variante Ómicron que ha llevado a varios países a registrar cifras récord de contagios.
En México, luego por fiestas de fin de año, los contagios se elevaron de manera importante. El último reporte de las autoridades sanitarias mostró que en las últimas 24 horas se contabilizaron 25 mil 851 casos nuevos de COVID, una cifra muy cercana al máximo pico que se registró a finales de agosto pasado.
Esto, sumado a la rápida propagación de Ómicron, ha llevado a que las personas recurran a las pruebas de COVID-19 de manera masiva.
Asismismo, se recomienda seguir todos los protocolos de seguridad para evitar más propagación del coronavirus, como distanciamiento social, doble mascarilla y estar al día con el esquema de vacunación.