Reino Unido ha presentado un aumento en los casos de COVID-19 y preocupa a su Gobierno. Por ello, el primer ministro Boris Johnson señaló que se encuentran preparados para, si es necesario, ingresar a la población en un segundo confinamiento con tal de evitar que las cosas se desborden nuevamente por el coronavirus.
Según la 'BBC', los británicos han registrado un total de 3395 nuevos casos en las últimas 24 horas, habiendo hasta el momento 385 936 contagiados. No obstante, el ministro de Sanidad, Matt Hancock, indicó que la cuarentena es el último recurso para frenar al virus.
“Haremos lo que sea necesario para garantizar la seguridad de los ciudadanos, pero la primera línea de defensa es respetar las normas de distanciamiento social”, sostuvo Hancock ante el mencionado medio de comunicación.
Asimismo, expresó que la segunda línea defensiva del Reino Unido se basa en el sistema de detección y rastreo de infectados, y le siguen los confinamientos focalizados. Las medidas a nivel nacional, como las aplicadas en marzo y mayo, son en casos de emergencia.
Además, el titular de Sanidad señaló que “no quiero que esto ocurra” y para ello se necesita que “la gente se una y reconozca que estamos ante un desafío serio”. Con la finalidad de que las personas comiencen a cuidarse por sí mismas y no por un encierro obligatorio.
Finalmente, siempre de acuerdo a la BBC, Inglaterra podría verse afectada por nuevas restricciones como medida sanitara. Esto derivará en el cierre de establecimientos hoteleros, pero las escuelas y lugares de trabajo necesarios se mantendrán funcionando.