La polémica de este partido fue tal, que inclusive el propio gobierno de Madagascar tomó cartas en el asunto sancionando a la federación nacional.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEl fútbol, en sus más de 100 años de historia está repleto de historias increíbles como la siguiente que tiene que ver con la mayor goleada que sucedió sobre un terreno de juego, la cual fue tal que incluso la FIFA tuvo que hacer algunos cambios en las reglas de juego. Créenos, ni siquiera te imaginas el resultado en el que acabó este partido.
Para narrar esta historia debemos retroceder unos 22 años, a 2002, concretamente a Madagascar, la isla más grande de África. Era un 31 de octubre y se verían las caras por la liga local el AS Adema contra el Stade Olympique L’Emyrne.
Lo más loco de lo que leerás a continuación es que el equipo ganador, el AS Adema, que ganó por el imposible marcador de 149 a 0, no anotó ninguno de los goles. Quizás la FIFA querría mantener este juego en el olvido, pero para su mala suerte está registrado en el Libro de los Récords Guinness.
Era la última fecha de la THB Champions League y el anotador de todos los goles fue el cuadro perdedor, es decir el Olympique L’Emyrne, quien era el vigente campeón y aspiraba a repetir el plato en dicho año soñando con la vuelta olímpica para celebrar el bicampeonato.
Todo se gestó una fecha antes, cuando nuestros protagonistas jugaron contra el Domina Soavina Atsimondrano. El cotejo acabó empatado, pero protestaron por un discutido penal en su contra que resignó sus chances de mantenerse como los campeones de la liga por segundo año consecutivo.
Con ese resultado y tras ganar su partido, el AS Adema ya tenía el título asegurado al llegar al última jornada.
Por lo que cuando ambos llegaron al partido que cerrará el torneo, los jugadores del Stade Olympique L’Emyrne, a modo de protesta por lo del que ellos consideraban fue una injusticia en el encuentro anterior no tuvieron mejor idea que marcar 149 goles en su propia portería hasta el pitazo final.
Al ver el deplorable espectáculo, los fanáticos furiosos abandonaron las graderías del estadio pidiendo la devolución de su dinero en boletería, pero ¿Qué sucedió después? al enterarse del escándalo, las autoridades pertinentes sancionaron por tres años a quienes identificaron como los culpables del boicot, es decir, el capitán Mamisao Razafindrakoto, el golero Dominique Rakotonandrasana, así como a Manitra Andrianaina y Rakatorimanana Tolojanahary.
El gobierno de Madagascar también tomó cartas en el asunto iniciando una investigación encabezada por René Ndalana, Ministro de Deportes, quien acusó de corrupción arbitral destituyendo a los dirigentes de la federación nacional.