La leyenda cuenta que a mediados del siglo XV, Túpac Yupanqui, años antes de ser proclamado inca, viajó hacia el oeste y descubrió la Polinesia, en Oceanía.
Únete a nuestro canal de WhatsAppLa historia oficial nos dice que fue James Cook fue el descubridor histórico de Oceanía, aunque otras versiones aseguran que fueron los navegantes portugueses quienes lo hicieron un par de siglos atrás: pero existe una teoría que afirma que el primero en pisar este continente no fue europeo, sino sudamericano y más específicamente peruano y HOY sabrás quién es.
Este hecho habría tenido lugar en el siglo XV y estuvo cargo de un emperador del Tahuantinsuyo, nos referimos a Túpac Yupanqui, hijo de Pachacútec, que para tiempos de este relato, todavía no era inca, sino Auqui es decir, príncipe heredero.
Esta teoría fue planteada y expuesta por uno de los historiadores peruanos más curtidos y serios en lo que se refiere a la civilización incaica: José Antonio del Busto (1932-2008), quien en su libro "Túpac Yupanqui, descubridor de Oceanía" plantea que cuando Túpac Yupanqui contaba con tan solo 25 años se embarcó en la aventura de su vida.
Esta travesía consistió en bajar a la costa para armar una flota de balsas con un importante contingente de hombres con las cuales navegó hacia el oeste, pues escuchó sobre la existencia de unas islas alejadas, siendo una de ellas la actual isla de Pascua.
Esto fue un logro importante, ya que los incas no se caracterizaron por ser grandes marinos. De hecho, se cree que el propio hijo de Pachacútec conoció el mar por primera vez cuando llegó a lo que hoy se conoce como Guayaquil (actual Ecuador) durante sus campañas militares.
De acuerdo a los estipulado por Del Busto, este viaje habría tenido lugar, aproximadamente, entre los años 1456 al 1461, llegando a más de una isla de la Polinesia, pero ¿Qué registros hay de este supuesto viaje de Túpac Yupanqui a Oceanía?
El reconocido historiador peruano, de hecho, viajó a estas islas polinesias en donde encontró una serie de tradiciones orales que hablan de la llegada de un señor venido desde el oriente, incluso, en nuestros días en estas tierras subsiste la danza del "rey Tupa".
Pero, no solo eso, pues Del Busto también encontró vestigios materiales, que no eran otra cosa que estructuras de piedra con un claro estilo incaico, como las que se pueden ver, por ejemplo, en el Cusco.
De acuerdo al libro antes citado, el futuro inca conquistador, llegó a las islas Mangareva, a las cuales los quechuas llamaron Auchumbi, seguido de Nuku HIva y Rapa Nui (esta última conocida como Ninachumbi).
En Mangareva se mantiene hasta el presente la leyenda del Rey Tupa, quien llegó a estas costas proveniente del este en una gran flota a la que llamaron Pae Pae, unas balsas a vela similares las que se cree Túpac Yupanqui habría utilizado para su viaje desde Guayaquil.
En su arribo, el Rey Tupa trajo consigo un serie de elementos desconocidos para los locales, como alimentos autóctonos de los andes, cerámicas, pero también otro tipo de piezas creadas por los andinos del siglo XV como telares y hasta obras metalúrgicas.
De hecho, existe la leyenda que Túpac Yupanqui habría traído consigo a su retorno hombres de piel negra estos, según la hipótesis de Del Busto, eran polinesios de las islas antes mencionadas.
Los arqueólogos han descubierto la presencia del camote en no pocas islas de la Polinesia, lo que puede ser un dato inequívoco del viaje de Túpac Yupanqui o, por el contrario, de un antiquísimo contacto comercial entre estas islas y las costas sudamericanas.
Es importante recordar que, en el caso del camote, este tubérculo tiene origen exclusivo en el Perú. específicamente en Chilca (región Lima) hace 8 mil años antes de Cristo y en la polinesia se le conoció como Kuumala.
Un dato adicional a lo anterior; en 2014 un estudio a 27 individuos de Rapa Nui mostró que un 8 por ciento de la composición genética de estos pobladores tiene raíces nativo americanas (esto siglos antes de la llegada de los europeos a estas tierras)
De hecho, en el libro "Túpac Yupanqui, descubridor de Oceanía", José Antonio del Busto no solo describe las ruinas que él asegura son de estilo incaico, sino que añade un apartado fotográfico en el cual podemos ver al historiador peruano posando junto a estas, teniendo de fondo el mar Pacífico.
Estos restos se encuentran en la isla Vinapú, que en idioma rapanui no tiene traducción, pero que en quechua significaría "licor que embriaga fuertemente", siendo estos un testimonio que refuerza no solo los relatos de la época sino también la teoría que estamos contando.
Por ello, es importante recurrir al escritor y cronista el español Pedro Sarmiento de Gamboa, escribió en el siglo XVI sobre Túpac Yupanqui:
"Andando Topa Inga Yupanqui conquistando la costa de Manta y la isla de la Puná y Tumbes, aportaron allí unos mercaderes que habían venido por la mar de hacia el poniente en balsas, navegando a la vela. De los cuales se informó de la tierra de donde venían, que eran unas islas, llamadas una Aucachumbi y otra Ninachumbi, donde había mucha gente y oro. Y como Topa Inga de ánimos y pensamientos altos y no se contentaba con lo que en la tierra había conquistado, determinó tentar la feliz ventura que le ayudaba por la mar… y se determinó ir allá. Y para esto hizo una numerosísima cantidad de balsas en que embarcó más de veinte mil soldados escogidos".
Y concluye con esto: "Navegó Topa Inga y fue y descubrió las islas Auachumbi y Ninachumbi y volvió de allá, de donde trajo gente negra y mucho oro y una silla de latón y un pellejo y quijadas de caballo (...) Hago insistencia en esto, porque a aquellos que tienen conocimiento sobras las Indias, les resultará un caso extraño y difícil de creer".