El mexicano Sergio Pérez (Sauber) ha asegurado tras el GP de Mónaco que haber firmado la vuelta rápida de la carrera monegasca le provoca más un sentimiento de frustración que de consuelo, ya que cree que tenía coche para haber hecho "algo importante".
A pesar de remontar desde la plaza 23 hasta la undécima, El mexicano ha vivido un fin de semana complicado en Mónaco ya que el buen rendimiento de su monoplaza se fue al tratase en la primera ronda de la sesión de clasificación cuando un fallo del coche le privó de marcar un tiempo y le postergó a la última línea de salida."No me sirve de consuelo haber dado la vuelta rápida, al contrario me da frustración. Me quiero olvidar ya de este fin de semana. Era una carrera en la que podía pelear por la victoria, pero en la clasificación no pude hacer nada. Ahora sólo deseo trabajar fuerte para mantener el ritmo que tenemos y que la surte se nos dé de nuestro lado", ha comentado.Checo Pérez considera Sauber tiene la velocidad y el coche para ganar alguna carrera. "Con el ritmo que llevábamos aquí era posible ganar o pelear por la victoria, por eso hablo de frustración, pero ahora toca seguir dándolo todo carrera a carrera y desear que la suerte esté de nuestro lado en algún momento", ha insistido.También ha comentado que las lágrimas de ayer eran por la impotencia que le causaba saber que tenía un coche para pelear por la pole y la falta de suerte que tuvo. "Lo di todo otra vez y ahora toca pensar en Montreal, donde el año pasado pude dar unas vueltas -no participó al resentirse del accidente de Mónaco- y estoy seguro que podemos ser competitivos", ha añadido.