Sheinbaum cumple su promesa y refuerza las medidas contra el tráfico de fentanilo, realizando un operativo con la línea divisoria fronteriza de Ciudad Suarez.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEl gobierno de Claudia Sheinbaum ha desplegado 10.000 efectivos del Ejército y la Guardia Nacional en la frontera norte, cumpliendo su compromiso con Donald Trump de reforzar las medidas contra el tráfico de fentanilo. Esta acción se produce en un contexto de creciente presión por parte de Washington para contener la crisis migratoria y frenar la entrada de drogas a Estados Unidos.
El jueves 6 de febrero, las fuerzas de seguridad intensificaron los patrullajes en zonas vulnerables de Ciudad Juárez, donde se han identificado cruces constantes de inmigrantes y actividades relacionadas con el narcotráfico. Siendo así, se aseguraron más de 30 escaleras y sogas utilizadas por los traficantes para facilitar el paso inmigrantes y sustancias ilícitas a territorio estadounidense.
El despliegue incluye drones de vigilancia, unidades motorizadas y vehículos militares con el objetivo de detectar intentos de cruce ilegal y desarticular redes de tráfico de drogas. Según el jefe de Estado del país norteamericano, estos soldados estarán específicamente asignados a detener el flujo de migrantes y la entrada de fentanilo a Estados Unidos.
El operativo ha generado una fuerte división de opiniones, sobre todo centrándose en el tema de la migración ilegal. Mientras algunos sectores consideran que estas medidas mejorarán la seguridad en la región, organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado su preocupación por el impacto en los inmigrantes que buscan asilo en Estados Unidos.
Expertos en política migratoria advierten que este refuerzo podría llevar a los inmigrantes a optar por rutas más peligrosas, exponiéndolos a mayores riesgos. Además, señalan que la militarización de la frontera no resuelve las causas estructurales de la migración, como la pobreza y la violencia en los países de origen.
Las autoridades mexicanas han asegurado que los operativos continuarán en los próximos días y que su impacto será evaluado en coordinación con las autoridades estadounidenses. Mientras tanto, la frontera sigue en alerta, y el mundo observa de cerca las consecuencias de este nuevo acuerdo entre México y Trump.