El organismo confirmó que, en casos específicos de incumplimiento, puede realizar visitas domiciliarias tras enviar notificaciones oficiales.
Una advertencia del Servicio de Impuestos Internos volvió a generar inquietud entre contribuyentes en Estados Unidos. La agencia confirmó que, en casos puntuales, puede avanzar con visitas presenciales a domicilios, una medida que solo se activa cuando existen incumplimientos fiscales sin resolver. El IRS aclara que estas acciones no son automáticas ni masivas. El proceso comienza siempre con intentos formales de contacto y solo escala cuando la persona o familia ignora reiteradamente sus obligaciones tributarias o no responde a notificaciones oficiales.
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Ignorar cartas del IRS puede activar auditorías presenciales.
Las visitas domiciliarias están vinculadas a situaciones concretas. Entre las causas más frecuentes se encuentran:
Antes de cualquier contacto presencial, el organismo envía una notificación escrita donde informa que el caso está bajo revisión. Solo después de ese aviso, un agente autorizado puede acudir al domicilio para continuar el proceso.
Cuando se concreta una inspección, el agente de ingresos tiene como función principal revisar información financiera. Esto incluye la solicitud de comprobantes de ingresos, gastos, actividad comercial u otros registros relevantes para la auditoría.
En determinados casos, el IRS también puede comunicarse con terceros como empleadores o instituciones financieras para verificar datos declarados. La agencia insiste en que estas instancias son poco comunes, pero necesarias cuando existen dudas fundadas sobre el cumplimiento fiscal.
Para evitar fraudes, el organismo recuerda cuáles son los únicos canales oficiales de contacto:
El IRS nunca contacta por redes sociales, mensajes privados, correos no solicitados ni exige pagos inmediatos a través de métodos inusuales.
La agencia fue enfática en marcar límites claros: no exige pagos en el acto, no amenaza con arrestos, no retira licencias ni utiliza mensajes automatizados para intimidar a los contribuyentes. Cualquier acción fuera de estos parámetros debe considerarse sospechosa. Ante dudas, el IRS recomienda verificar siempre la identidad del agente y revisar las notificaciones recibidas antes de compartir información personal o financiera.