Piero Quispe es una de las gratas revelaciones/confirmaciones de la temporada en Universitario. El volante de 21 años ya demostraba su talento y capacidad en las fechas finales de la temporada anterior y en esta ha comenzado ganándose el titularato.
El mediocampista, oriundo de San Martín de Porres, que llegó primero a la Academia Héctor Chumpitaz, y luego dio el salto a las filas cremas, tiene -como muchos futbolistas en nuestros país- una historia de sacrificio en sus espaldas.
"De chibolo le hubiese dado lo necesario... pero no había para las vitaminas, a veces no había para el pasaje, no había para chimpunes... fue bien díficil", expresó Arturo Quispe, en diálogo con Willax Deportes.
"Lloro por el sacrifico que se tuvo que hacer... agradezco a todas las personas que apostaron por mi hijo", dijo con la voz entrecortada el progenitor del nuevo valor crema. "Yo trato de guiarlo y protegerlo”, agregó.
"Él ha llegado gracias a su talento y constancia, yo le di todo lo que podía darle", aseveró visiblemente emocionado.