Descubre cómo drenar el agua de lluvia que se queda empozada en el techo de tu casa
Líbero te comparte algunas formas de drenar el agua de tu techo de manera práctica y segura tras registrarse lluvias intensas.
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El cambio de clima viene afectando varias regiones del país, ya que las intensas lluvias dejan a cientos de viviendas afectadas. Y como se recuerda el ciclón Yaku, huaycos y los desbordes de los ríos han dañado terrenos, casas y comercios.
No obstante, otro problema grave que genera las lluvias es el agua que se empoza en los techos. En la capital, sobre todo, la mayoría de los predios, tienen tejados planos, es decir, no tienen caída. Esto hace que el agua se quede atorada, lo que puede ocasionar un grave daño a la estructura de la vivienda.
Pero, ¿cómo podría drenarse el agua de los techos? Ante esta interrogante, Líbero te menciona algunos trucos caseros que te serán muy útiles.
¿Cómo drena el agua de la lluvia empozada en el techo de tu casa?
1. Succión o sifón con manguera flexible
Este es uno de los trucos más simples y usados, sobre todo por los trabajadores de la construcción. Consiste en sumergir una manguera en el lugar donde se encuentra acumulada el agua y tapas uno de los extremos para que no entre aire.
Después, retirar fuertemente el lado tapado y colocarlo en el lugar donde se desea drenar. De esta forma, se iniciará a eliminar el líquido empozado.
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2. Succión o sifón con válvula de paso en maguera rígida
Lo primero que debes realizar es cortar el lado de una manguera en diagonal. Esto ayuda a que el agua escurra con facilidad por el tubo. Mientras que el otro extremo, se colocará una válvula de paso.
En el lado que se hizo el corte, se empezará a llenar agua hasta el límite. Luego, se tapa y se sumerge en el lugar donde está empozado el agua. Después de unos segundos, se destapa y se procede a abrir la válvula. De esta manera, el agua saldrá rápido.
3. Succión o sifón con la boca
Este método es muy común, pero hay que tener mucho cuidado. Consiste en colocar un extremo de la manguera en el agua empozada y el otro en el lugar donde se quiere desaguar el líquido. En este último extremo, la persona debe succionar con la boca hasta que sienta que el agua está pasando por la manguera.