En medio de las celebraciones por el Día de la Cerveza, el Diario Líbero te presentará detalles sobre una de las bebidas más tradicionales en el Perú.
Únete a nuestro canal de WhatsAppPilsen Callao es una de las cervezas más exitosas y emblemáticas del Perú porque cuenta con más de 150 años en el mercado y logró sobrevivir a dos crisis que fueron provocadas por guerras. En medio de las celebraciones por el Día Internacional de la Cerveza, debes conocer más sobre su historia y los premios que ganó por la calidad de su producto.
Actualmente esta cerveza tiene dos presentaciones de diferentes tamaños en las bodegas o supermercados, en botella de vidrio y lata, pero hace más de un siglo comenzó en las costas peruanas, sobre todo en el Callao, como una bebida artesanal proveniente de Alemania.
La historia de Pilsen Callao inició cuando el alemán Federico Bindels, conocido por su profesión de cervecero artesanal, decidió fundar la Cervecería Pilsen el 15 de octubre de 1863. Esta fabrica se encontraba ubicada en la antigua calle de Lima, hoy avenida Sáenz Peña, ubicada en la Provincia Constitucional del Callao, aunque en la actualidad aún se puede ver una de sus edificaciones.
El inicio de esta empresa se vio amenazada por el combate de Dos de Mayo, pero la marca logró expandirse a otras zonas del país con la inversión del empresario francés, Aloise Kieffer. En 1878, Pilsen Callao logró llevarse la medalla de oro por su calidad en la Exposición Industrial que realizó en Paris.
En medio de su éxito nacional e internacional, en 1879 estuvo a punto de frenar sus producciones por la guerra con Chile en 1879. En 1904 se sumó el empresario petrolero Faustino Piaggio y comenzaron a vender cerca de 300 mil botellas de cerveza al año. En el 2008 se posicionó como producto tradicional al ganar el Effie de Oro y el Gran Ppremio effie .
En 1992, Pilsen Callao vivió una de sus peores crisis desde su creación debido a un error de producción en la fabricación de sus cervezas que afectados el sabor del producto. El resultado fue una bebida sin espuma y con un nauseabundo olor. Esto fue aprovechado por Cristal quién impulso sus bebidas y, en 1994, Backus Johnston compró el 62% de las acciones de Pilsen.