Franck Ribéry a sus 36 años podría optar por un retiro en el fútbol tras su brillante estadía en el Bayern Múnich, no obstante, el futbolista francés eligió seguir estando en lo más alto nivel y fichar por la Fiorentina de Italia.
Asimismo, Franck Ribéry es protagonista de una de las infancias más duras del fútbol mundial. Sus padres biológicos lo abandonaron en un convento de monjas. Además, sufrió un accidente de tránsito que lo marcó de por vida.
Franck Ribéry tenía dos años y padeció un brutal accidente de tránsito. Ribéry venía en el asiento de atrás de un automóvil y por el fuerte impacto fue a dar al parabrisas de enfrente, ocasionándole una gran herida en el cara.
De inmediato, trasladaron al pequeño al hospital más cercano. Una vez en el centro médico, un grupo de médicos lo operó y, para salvar su vida, le colocaron más de 80 puntos de sutura. Esta acción le provocó una enorme cicatriz en su rostro. Por ello, lo llaman 'Cara cortada'. ¡Tremendo!
Franck Ribéry, subcampeón con Francia en la Copa del Mundo de Alemania 2006, manifestó en alguna oportunidad que su familia fue la principal afectada por las secuelas de la su cicatriz, ya que personas recibía burlas de la gente.
"La cicatriz eso fue lo que me dio este carácter y esta fuerza. Porque cuando eres chico y tienes una cicatriz como esta no es fácil. Las forma en la que las personas te ven, las críticas. Mi familia sufrió de esto", reveló Ribéry, quien nunca ha querido operarse porque esta herida lo ayudó a formar su carácter.
Wahiba Belhami, profesa del Islam, se apareció en la complicada juventud de Franck Ribéry y, con el pasar de los años, se convirtió en una pieza clave para que la carrera del jugador no tuviera quizás un triste final. Belhami es la madre de sus cuatro hijos y su más fiel seguidora. Por amor, Ribéry se pasó a la religión musulmana y hasta cambió de nombre: para el Islam él es Bilal Yusuf Mohammed.
Franck Ribéry mezclaba su trabajo de albañil con su pasión por el fútbol. Sus primeros pasos los dio en la Union Sportive de Boulogne. Después pasó por Alés, Brest y Metz. En el 2004 es fichado por el Galatasaray y luego es contratado por Bayern Múnich.
Franck Ribéry, según la prensa italiana, sobará cuatro millones de euros por cada temporada. "Estoy muy feliz. Luca Toni me habló del equipo, que es un gran club, e incluso de la ciudad, que es hermosa", confesó Ribéry a los medios.