La vez que Mike Tyson descubrió la infidelidad de su esposa con Brad Pitt: los encontró en situación íntima

Mike Tyson es una de las figuras más grandes en la historia del deporte, un boxeador cuya influencia trascendió más allá del ring y lo convirtió en un verdadero icono. A pesar del paso del tiempo, su legado sigue intacto, especialmente con su reciente combate contra Jake Paul, que volvió a poner a Tyson en el centro de atención. Su vida está llena de historias sorprendentes, pero una de las más insólitas involucra a Brad Pitt y a su primera esposa, Robin Givens.

El encuentro tuvo lugar en 1988, mucho antes de que Brad Pitt alcanzara fama internacional por su papel en Thelma y Louise de Ridley Scott. En ese entonces, Pitt tenía solo 25 años y, por circunstancias del destino, se encontró cara a cara con Tyson en uno de los momentos más complicados de la vida del boxeador.

Por ese entonces, Tyson ya era estrella mundial, y atravesaba un doloroso divorcio con Robin Givens, quien, durante esa época, comenzó a salir con Pitt. Lo que ocurrió después se convirtió en una de las historias más sorprendentes de la vida de Tyson.

Tyson relató en una entrevista con el programa The Real que, en medio de su tumultuosa separación, decidió hacer una visita a la casa de Givens. “Tenía que ir a ver a mi abogado, pero decidí pasar por la casa de Robin para ‘resolver’ las cosas rápidamente. Qué puedo decir, era joven y la extrañaba”, confesó Tyson entre risas. Pero lo que no esperaba era encontrar a Brad Pitt en la escena.

“Él debía estar borracho o algo así. Me rogaba que no lo golpeara y me decía que solo estaban repasando un guion”, recordó Tyson. A pesar de la tensión del momento, el encuentro no pasó a mayores. El ex campeón de boxeo explicó que, en ese entonces, estaba emocionalmente devastado. “Estaba en un coma emocional. Me habían roto el corazón y me dejó completamente abrumado. No tenía energía ni para pelear”, admitió Tyson.

A pesar de la naturaleza surrealista de la historia, Tyson no guarda rencor hacia Brad Pitt. De hecho, en tono humorístico, el boxeador comentó: “Si hubiese tenido algún tipo de problema con él, ya no estaría vivo”, haciendo referencia a lo que podría haber ocurrido si la situación hubiese escalado.

Al final, lo que comenzó como una anécdota digna de una película terminó siendo una curiosa historia de cómo dos figuras legendarias del entretenimiento coincidieron en un momento de tensión y dolor para Tyson, pero sin mayores consecuencias. Y así, el mito de Mike Tyson sigue creciendo, con historias como esta que solo añaden más misterio a su ya enigmática personalidad.