Dota 2: Kingteka señala que, a comparación de Smash, no está baneado

Tras realizar controversiales declaraciones contra 4D Esports, el pro player peruano Kingteka se vio sancionado por su equipo y suspendido del Dota Pro Circuit por un encuentro. Sin duda alguna, esto dejó un sinsabor en seguidores de la escuadra, que culparon al jugador por perjudicar al equipo que apostó por el pese a su falta de ritmo competitivo.

Sin embargo, Kingteka aseguró que él no ha sido baneado por Valve, a diferencia de Smash, que sí recibió un ban por parte de la compañía en el 2016.

"Eso no es un ban, es una sanción. Ban es el 'prosor'. Es una sanción, mano. Sancionado tienen que decirme", aseguró. "No es ban, es una sanción que me han dado, nomás. Eso no significa estar baneado, h..."

Aún así, Kingteka nuevamente se ha visto involucrado en problemas en la escena competitiva. Debido a sus polémicas declaraciones, Balrogs Esports decidió multar a su offlaner, y lanzó un comunicado donde se distanciaban de los comentarios que realizó.

"Ante los acontecimientos sucedidos el día de ayer en el streaming de nuestro jugador Queenteka, queremos hacer de conocimiento público que no compartimos los comentarios vertidos y el exabrupto que tuvo el jugador en mención en contra de los organizadores del torneo 4D Esports", anotó el comunicado. "Rechazamos tajantemente este tipo de comportamientos, ya que no contribuyen nada bueno. Por lo contrario, van en desmedro de la imagen y de la organización".

De esta forma, la organización reveló que sancionó y multó a Kingteka por sus declaraciones bajo un reglamento interno que está diseñado para evitar este tipo de situaciones. Asimismo, Balrogs se disculpó en nombre de su jugadorp (que también ofreció sus disculpas posteriormente) y aseguró que este evento no volverá a ocurrir.

Cabe resaltar que Kingteka recientemente se unió a Balrogs después de pasar más de un año alejado de la escena competitiva de Dota 2. Aunque el pro player ha mostrado un gran nivel en sus primeros encuentros con la escuadra, un error parece haberlo puesto en la cuerda floja dentro de la organización.