De vuelta a casa

Su persistencia incluía ciertas pataletas con pizcas de majadería, pero José del Solar desconocía que el Giovanni Hernández que conoció en su fugaz paso por el Atlético Colón de Santa Fe se había revalorizado gracias a sus pinceladas en el Junior de Barranquilla y con su regreso a la selección de Colombia.

Entonces Julio Pacheco, el presidente de la ‘U’ a boca de urna, se empinó para decirle al ‘Chemo’ que traer al ‘Príncipe’ demandaría el desembolso de casi US$50 mil mensuales que caerían en saco roto si es que el colombiano jugaba a cuentagotas.Y es que el club de Ate no está en condiciones de deshojar margaritas por nadie. Dicen que Del Solar entendió el mensaje con una interrogante: “¿Y a quién podrás traer para esa zona?”.Pacheco, chiquito, pero vivo, le planteó una solución que ‘Chemo’ se comprometió a estudiarla en menos de lo que canta el gallo. ¿Quién? ¡Mayer Candelo! Ajá, más vale colombiano conocido que uno por conocer. Muecas por aquí, pucheros por allá.Pacheco le dijo que motivado y reforzado en la parte física, Candelo podía rendirle como el ‘Príncipe’, claro, además es mucho más barato que Hernández y, como valor agregado, tiene el deseo de regresar a la que considera como su casa quizás a quemar sus últimos cartuchos.Amigo míoPara nadie es un secreto, menos para el ‘Chemo’, que Pacheco sostiene una estrecha relación amical con Candelo. Eso influye desde cualquier punto de vista. Además, la situación contractual del colombiano con la U. César Vallejo está por acabar y ninguna de las partes tiene intenciones de conciliar lo que hoy parece insalvable.Candelo pudo regresar a la ‘U’ en la época de Juan Reynoso, pero ciertas influencias, como la palabra de Ñol Solano, pesaron más de la cuenta para evitar esas sombras que preocupan a muchos.Pero hoy esas ‘joyitas’ son historia, entonces la operación por el regreso de Candelo es factible. Será cuestión de ajustar algunas condiciones, de tratarlo con pinzas y decirle al jugador que la ‘U’ no es Vallejo. Bueno, Mayer así lo entiende y así lo acepta. Dicen que por vestirse otra vez de crema es capaz de cualquier cosa, incluso de forjar como goleadores a Fano y a Vitti.