Regina Higuera decidió regresar a México de forma voluntaria para evitar la inseguridad de perder su hogar, su empleo o quedarse sin vivienda.
En medio de una ola creciente de redadas migratorias impulsadas por la administración Trump, Regina Higuera, que llevaba 36 años viviendo en Estados Unidos, se vio obligada a autodeportarse, tratando de recuperar algo de control sobre su vida frente a la incertidumbre. Su experiencia refleja la situación que muchas personas viven al enfrentar la difícil realidad de ser inmigrantes en EE. UU.
La historia de Higuera nos recuerda lo difíciles que son las decisiones que enfrentan los inmigrantes cuando viven rodeados de miedo y desconfianza. Junto a su hija, cruzó la frontera para comenzar una nueva etapa en su vida, aunque eso significó dejar atrás a sus hijos y nietos, quienes son ciudadanos estadounidenses.
Regina Higuera llegó a EE. UU. a los 15 años y dedicó su vida a trabajar en fábricas textiles. A pesar de nunca haber recibido beneficios del Estado, siempre cumplió con sus obligaciones fiscales.
Su hija, Julie Ear, enfatiza que su madre solo quería trabajar y proporcionar un mejor futuro para su familia. Sin embargo, el clima actual de miedo y represión ha cambiado drásticamente la vida de muchos inmigrantes que, como Higuera, solo buscan una vida digna.
"Nadie está a salvo", dijo Ear a CBS News al referirse al endurecimiento de las políticas migratorias bajo el segundo mandato de Donald Trump.
Ahora, desde Guerrero, Higuera experimenta una mezcla de paz y nostalgia. Aunque ha encontrado tranquilidad en su nuevo entorno, la distancia de sus hijos y nietos pesa en su corazón. Julie Ear comparte que, a veces, se olvida de la lejanía, pero las reuniones familiares le recuerdan la ausencia de su madre. Esta situación refleja la realidad de muchos inmigrantes que, al regresar a su país, deben lidiar con la separación de sus seres queridos.
La historia de Regina Higuera es solo una entre miles. Muchos inmigrantes en Estados Unidos viven en la incertidumbre debido a las redadas de ICE. Algunos optan por esconderse, mientras que otros, como Higuera, eligen la autodeportación. A pesar de la adversidad, hay quienes mantienen la esperanza de regularizar su situación legal y reunirse con sus familias en un futuro.
Las redadas migratorias de ICE aumentaron significativamente, con más de 100.000 arrestos en lo que va del año. La administración Trump implementó políticas que no solo buscan la deportación, sino que también ofrecen incentivos a quienes decidan regresar a su país de origen.