El primer Papa estadounidense se pronuncia públicamente por primera vez sobre aborto, inmigración y el rol de la Iglesia en la sociedad.
El martes por la noche, frente a su residencia de verano en Castel Gandolfo, un periodista preguntó al Papa, nacido en Chicago, sobre la controversia en torno a los planes de una institución católica de honrar al senador demócrata de Illinois, Dick Durbin, a pesar de su apoyo al aborto. El pontífice, León XIII, señaló que los políticos católicos deben ser evaluados considerando todas sus posturas y aprovechó la ocasión para reflexionar sobre el trato "inhumano" que reciben los inmigrantes en Estados Unidos.
El Papa León señaló que quienes se oponen al aborto pero respaldan la pena de muerte no pueden considerarse verdaderos defensores de la vida. Del mismo modo, cuestionó si es coherente llamarse "pro-vida" cuando se aprueba un trato cruel hacia los inmigrantes en Estados Unidos.
"Quien dice estar en contra del aborto pero a favor de la pena de muerte no es realmente pro-vida", afirmó el Papa León XIV. "Y quien dice estar en contra del aborto pero a favor del trato inhumano a los inmigrantes en Estados Unidos, no sé si eso puede considerarse pro-vida".
Estas declaraciones marcan la primera vez que el primer Papa nacido en Estados Unidos se pronuncia de manera pública sobre temas que generan intensos debates en su país, como el aborto, la inmigración y el papel de la Iglesia Católica en la sociedad.
Finalmente, el Papa León XIV llamó a todos, especialmente a los residentes de su estado natal, Illinois, a practicar el respeto mutuo y recordó que la Iglesia Católica tiene enseñanzas muy claras sobre estos temas.
En respuesta, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, reconoció las críticas del Papa, pero defendió que, bajo la administración actual, no se ha dado un trato inhumano a los inmigrantes indocumentados, señalando que en gobiernos anteriores hubo casos graves de abusos, explotación y violencia en la frontera sur.
"Rechazo el trato inhumano a los inmigrantes indocumentados en Estados Unidos bajo esta administración", declaró Leavitt a la prensa el miércoles en la Casa Blanca. "Sin embargo, durante la administración anterior también hubo un trato inhumano significativo: muchos inmigrantes fueron víctimas de trata, violación y golpizas, y en varios casos incluso fueron asesinados en la frontera sur de Estados Unidos".
"Esta administración está tratando de hacer cumplir las leyes de nuestra nación de la manera más humana posible", agregó Leavitt.