Tras el fin del TPS, muchos venezolanos quedan sin protección migratoria; el artículo examina cómo solicitar asilo y conservar estatus legal en EE. UU.
A partir del 7 de noviembre de 2025, los ciudadanos venezolanos que contaban con el Estatus de Protección Temporal (TPS) dejaron de tener permiso laboral y la inmunidad frente a la deportación. Esta medida impacta de manera significativa a quienes actualizaron su estatus durante la extensión otorgada en 2023. La Corte Suprema de Estados Unidos confirmó la decisión del Departamento de Seguridad Nacional que eliminó este programa de protección migratoria.
El asilo se presenta como la vía principal para evitar la deportación.
El asilo sigue siendo la vía legal más efectiva para quienes temen persecución en Venezuela por motivos políticos, religiosos, de nacionalidad o pertenencia a un grupo social. El proceso requiere estar físicamente en EE. UU. y completar el formulario I-589, preferiblemente dentro del primer año de ingreso. Quienes tenían TPS pueden justificar solicitudes tardías, ya que el programa se considera una “circunstancia extraordinaria”.
Existen dos modalidades:
El asilo también permite incluir al cónyuge e hijos menores de 21 años. Si se aprueba, después de un año se puede solicitar la residencia permanente (I-485).
El fin del TPS deja a miles de venezolanos vulnerables a detenciones y pérdida de beneficios laborales y sociales, como permisos de trabajo y licencias. Aunque hay litigios en curso que buscan revertir la medida, expertos advierten que estos podrían tardar años.
Según el abogado Jesús Reyes, quienes ya tienen solicitudes en curso familiares, residencia o asilo seguirán protegidos, pero es crucial actuar rápido y contar con asesoría profesional.