Lionel Messi puso el tango y Ousmane Dembélé le siguió el paso como si fuera un argentino más. Entre los dos -que se entienden casi a la perfección- destruyeron al Levante (3-0) y le dieron al Barcelona el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey.
Los azulgranas necesitaban remontar un 2-1 en contra y lo hicieron de la mano de la “Pulga”, que estuvo -una vez más- iluminado y regaló dos soberbias asistencias a Dembélé. El francés no las desaprovechó de cara al arco y le dio tranquilidad a todo el Camp Nou.
Pero la fiesta no estaba completa sin el gol de Messi. El público lo pedía con constantes cánticos en su honor y el “10” respondió como mejor sabe hacerlo. Apareció en el complemento para con un toque de calidad dejar sin chance al portero y sellar la victoria para los de Ernesto Valverde. Trabajo cumplido.
La alegría, sin embargo, no es completa debido a que Levante reclamó ante los despachos la posible alineación indebida de Chumi en el once “culé” en el partido ida. Hoy se conocerá la decisión de la Federación Española de Fútbol.
La “Pulga” llegó a su gol número 49 en la Copa del Rey y es el segundo máximo artillero “culé”.