Gustavo Peralta Coello
Universitario | Diego Armando Chávez Ramos tiene tan solo 26 años, pero para muchos su carrera como futbolista ya estaba acabada por su mala cabeza, por esas amistades tóxicas, por muchos factores. Hoy el cuadro 'crema' le da una nueva posibilidad y él promete sudar sangre si es posible, aunque contó que pensó en el retiro.
Tu felicidad se nota a kilómetros. ¿De qué tienes ganas en esta nueva etapa?
De recuperar el tiempo. Estoy muy feliz. Muy agradecido con todas las personas que han tenido que ver con mi regreso al club y en especial con el comando técnico. Yo sé que esta oportunidad la voy a saber aprovechar.
¿Qué decirle a la gente que dice que no hiciste méritos para volver?
Yo los entiendo y con justa razón. Seguramente están en contra por el tema de mi pasado, pero hoy ya tengo dos hijos, tengo mi familia, pienso diferente. Sé que ahora estoy en otra etapa, más maduro y sé lo que debe hacer un futbolista profesional.
¿Qué tan duro fue salir de la “U”, estar sin rumbo?
Todo lo que me pasó, salir en temas de escándalos, que no me cuidaba, que no dormía a mis horas, hoy me sirve para haber encontrado la madurez. Quiero hacer bien las cosas. Sé que esta es la última oportunidad que voy a tener en Universitario, en mi casa, el club que yo amo.
¿Cuántas veces te arrepentiste de tus malas decisiones?
Muchas veces. Quisiera retroceder el tiempo, pero quizá en ese momento no tenía a las personas correctas para hacer las cosas bien. Tal vez todo hubiera sido distinto.
¿En algún momento pensaste abandonar el fútbol?
Sí, lo pensé muchas veces. Como muchos saben yo tengo una empresa con la familia de la mamá de mis hijos y pensaba dedicarme solo a eso en su momento. Estuve a punto de tomar la decisión, es más hasta me iba a ir a vivir al extranjero con mi familia, pero luego decidí esperar esa nueva oportunidad en la “U”.
¿Cuántos kilos bajaste?
13 kilos, estoy en mi peso, me siento bien físicamente. La “U” se fue a Argentina a la gira y yo me quedé en Campo Mar concentrando y haciendo doble turno con la reserva, se lo pedí al comando técnico. Yo sabía que estaba a prueba y tenía que llenarle los ojos al “profe” Gregorio Pérez.
Foto: Eric Villalobos
Sabes que no la vas a tener nada fácil con Aldo Corzo.
Aldo es una gran persona, un jugador de selección. También está Zevallos. Sé que va a ser duro ganarse el puesto. Acá el que esté mejor va a jugar y eso va a depender del profesor. Yo me entreno para cada día estar mejor y esperando mi oportunidad. Quiero agradecerles a los hinchas por cada aliento que me dan y el día que me toque jugar voy a matar por la camiseta.