La Municipalidad de Surco clausuró una veterinaria donde falleció una perrita por una mala praxis, según denunciaron algunos vecinos. De acuerdo a la comuna, el local ofrecía servicios de los que no tenía permiso.
Agentes de la Subgerencia de Fiscalización de Surco llegaron hasta el Hospital Veterinario Animal, ubicado en la cuadra 43 de la Av. Tomás Marsano, en la urbanización Vista Alegre, donde pudieron constatar que el lugar carecía de protocolos y certificados de desinfección contra el coronavirus.
Además, cuando se le requirió a uno de los administradores, José Zevallos, las licencias del local, solo tenían permiso para consultorio y para realizar baños de mascotas.
"El giro de este negocio es consultorio pero lo que el señor tiene adentro es una clínica. Hace operaciones de animales y de ello no tiene permiso. Lo que dijo es que los servicios que aparecen en su publicidad no lo efectúan acá sino en otro lugar", contó Yovana Anaya, fiscalizadora de Surco.
Durante la inspección al local, un grupo de vecinos reclamó por la muerte de la perrita. Ellos agradecieron al municipio por clausurar el negocio.