El gobierno norteamericano sanciona a funcionarios y a ciudadanos del estado de Georgia debido a la represión violenta de protestas callejeras.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEstados Unidos anunció nuevas sanciones y restricciones de visas dirigidas a ciudadanos de Georgia. Estas medidas además incluyen sanciones financieras contra dos funcionarios gubernamentales y dos miembros del grupo de extrema derecha pro-ruso en el país, a quienes se les acusa de participar en la represión violenta de las protestas.
Asimismo, las manifestaciones en cuestión surgieron como reacción a la aprobación en mayo por parte del parlamento georgiano de una polémica ley sobre "agentes extranjeros". Esta ley, que ha sido criticada por su presunta influencia del Kremlin y por su carácter autoritario, desató una fuerte indignación entre la ciudadanía y llevó a numerosas protestas en las calles.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos (DOS) dio a conocer sobre esta regla obligatoria de restricciones de visado a más de 60 personas georgianas, quienes fueron responsables o cómplices de debilitar la democracia en Georgia. Cabe resaltar que estas penalizaciones fueron establecidas por el Departamento de Estado y por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro.
En ese marco, el comunicado oficial del Departamento del Tesoro detalló que la violencia se evidenció por medio de palizas a manifestantes, entre los que estuvieron presentes ciudadanos georgianos y políticos de la oposición.
"Seguimos preocupados por los abusos de los derechos humanos y las acciones antidemocráticas en Georgia, y seguiremos considerando la posibilidad de adoptar medidas adicionales en respuesta a ello. Estados Unidos apoya inequívocamente los derechos de los georgianos a reunirse, hablar y protestar pacíficamente sin temor a la violencia, la intimidación o la represión", señaló en un comunicado el secretario de Estado, Antony Blinken.
La controvertida ley de "agentes extranjeros" aprobada por el Parlamento de Georgia el pasado 14 de mayo, busca que los medios de comunicación y organizaciones que tengan más del 20% de financiamiento foráneo se registren como agentes con influencia extranjera. Cabe resaltar que esta ley fue aprobada pese al rechazo de la oposición y de Occidente, ya que es comparada con la ley rusa para acallar a la oposición.