En algunas oportunidades nos vemos envueltos en situaciones incómodas o confusas que incluso terminan involucrando a policías y siempre es bueno tener conocimiento general sobre lo que podría suceder en estos casos. En ese sentido, Líbero ha preparado una nota con todos los detalles al respecto.
Para empezar, un agente de la Policía Nacional del Perú (PNP) puede proceder a una intervención vehicular por distintos motivos, ya sea porque se ha cometido una infracción flagrante de tránsito, cuando se encuentre ejecutando un operativo policial o las famosas 'batidas' y cuando se encuentre realizando acciones de fiscalización.
En ese sentido, debemos saber que las intervenciones responden a un protocolo establecido en el Reglamento Nacional de Tránsito, donde se indican qué cosas puede y no puede hacer un policía. Por ello, en la nota de hoy, vamos a responder preguntas clave acerca de este tipo de intervenciones.
Sí, la autoridad de tránsito puede solicitar DNI, licencia de conducir vigente, tarjeta de identificación vehicular, certificado de inspección técnica vehicular vigente y el seguro obligatorio de accidentes de tránsito (SOAT) o del certificado contra accidentes de tránsito (CAT), en caso corresponda. Además, puede solicitar permisos por lunas polarizadas u otros casos específicos.
No, los únicos facultados para poner una papeleta son los policías de tránsito y de carreteras.
Sí, el conductor está obligado a realizar las pruebas solicitadas para determinar su estado de intoxicación por alcohol, drogas, entre otros. Negarse establece la presunción legal en su contra.
No, pero en casos estrictos como el de cometer un delito, ante una infracción vehicular grave o ante un accidente de tránsito, el agente puede llevarse el vehículo a una dependencia policial.
No, a menos que el intervenido haya reaccionado con suma violencia. En esos casos, el agente deberá retener al conductor y llevarlo a una comisaría y redactar un informe en presencial de un fiscal. Dependiendo de la reacción del detenido, también podrá hacer uso de su arma reglamentaria.