El matrimonio es uno de los momentos más importantes en la vida de dos personas que desean unir sus vidas para siempre, sin embargo, así como existen parejas que se quedan juntas hasta la eternidad por amor, existen otras que lo hacen por motivos ajenos al sentimiento.
Aunque suene algo muy descabellado y bastante triste de conocer, pues se supone que al casarse estas personas se elijen para ser uno solo desde el día en que se dan el esperado 'sí', no todo es color de rosa.
En otras palabras, este tipo de matrimonio se realiza primordialmente para obtener un beneficio económico, social o migratorio, sin que exista entre los contrayentes un vínculo sentimental real o profundo.
La mayoría de bodas se dan por conveniencia debido a algunos de los factores ya mencionados, sin embargo, hay uno en especial que está altamente probado y es de los casos más comunes que se ven alrededor del mundo.
Este tipo de uniones se da como una de las puertas más fáciles para que muchos inmigrantes regularicen su situación en el país en donde desean quedarse, y sí, lo logran, pero a costa de un matrimonio no deseado.
Con el pasar del tiempo la cantidad de personas que se casan por alguna razón que no sea amor, crece. Hasta se conoce de casos en los que se busca contraer nupcias y es anunciado como una oferta de trabajo.
“Este tipo de nupcias se da en pleno siglo 21, ya sea por comodidad, necesidad, fácil opción para lograr el sustento económico o resolver un problema de estatus legal”, explicó para una entrevista hace unos años, la psicoterapeuta Romi Torres-Ward, basada en Los Ángeles.
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