Durante milenios, esta fruta se ha consumido para evitar el desgaste cerebral, pero también para refrescar el cuerpo y evitar los letales golpes de calor.
Únete a nuestro canal de WhatsAppEs un hecho incontenible que con el paso de los años, sobre todo cuando llegamos a la tercera edad, que nuestro cerebro comience un proceso de desgaste que puede devenir en ciertas problemas de tipo neurológico, pero existen algunos alimentos que consumidos en el tiempo pueden fortalecer nuestra masa gris.
Nos referimos a la sandía, esa enorme fruta que se suele consumir en épocas de intenso sol para refrescar e hidratar el cuerpo humano de las altas temperaturas; sin embargo, es una gran fuente de nutrientes que son sumamente positivos para nuestro organismo.
Y, lo mejor de todo, es que podemos encontrarlo en prácticamente cualquier parte del mundo, incluido países de Latinoamérica y Sudamérica como México, Perú, Colombia, Venezuela, entre otros.
Y es que este fruto es originario del África tropical; los estudios han determinado que su cultivo se remonta hace 3,500 años, principalmente en el valle del Nilo, apareciendo por primera vez en los jeroglíficos egipcios.
Los antiguos griegos la conocían como "pepon", siendo utilizada por estos, entre otros usos, como medicamento diurético, pero también para combatir el golpe de calor, principalmente, en los niños.
Mientras que en la Edad Moderna, fueron los europeos (españoles, ingleses, franceses y holandeses) quienes llevaron la sandía a América a partir del siglo XVI.
Toma nota, porque a continuación conocerás las propiedades con que cuenta la sandía.
Ahora bien, vamos a explorar a grosso modo cuáles son los beneficios que experimentará tu organismo consumiendo de forma regular sandía.