Real Madrid empató 2-2 ante PSG y se quedó sin chances ser líder del Grupo A

Increíble, pero cierto. En el mejor partido del Real Madrid en la temporada, una desconcentración defensiva se trajo abajo una magnífica actuación coral y el equipo de Zinedine Zidane apenas empató a dos goles ante el PSG, por lo que, se quedó sin opciones de clasificar a los octavos de final como líder del Grupo A.

Y es que el Real Madrid dejó en evidencia su notable mejoría en las últimas semanas. Zidane acertó con el ingreso de Isco en el once y el dominio del local fue abrumador ante el rival que lo goleó 3-0 en París y se se vio muy superado en el mediocampo.

La presión alta, la presión post pérdida y la circulación de balón fueron las claves para que el Real Madrid se imponga al PSG. El gol era cuestión de tiempo y llegó a los 16' gracias a un jugadón de Hazard. El belga limpió la cancha por izquierda, jugó por derecha con Valverde, el uruguayo combinó con Carvajal, Isco le pegó al palo y Karim Benzema definió a placer en el área.

Ahora bien, el PSG tiene a Kylian Mbappé y aquello no es poca cosa. El francés al espacio es un peligro latente de gol y con Di María lanzando la visita merodeó el empate, no obstante, la defensa estuvo bien presta para cerrar, interceptar y marcar en posta a los jugadores más peligrosos de la visita. 

Sin embargo, en una no llegaron y Courtois terminó barriendo por inercia a Icardi ante tras una salida alocada. El árbitro le sacó la roja, pero la intervención del VAR hizo rectificar la decisión del juez que retrotrajo la jugada a una falta de Gueye contra Marcelo en el inicio de la contra rival.

El partido pedía un cambio en el PSG y Tuchel no fue ajeno a esta situación: adentro Neymar. El brasileño le dio mayores variantes a la visita, pero la superioridad del Real Madrid siguió latente hasta la llegada del 2-0 y la salida de Hazard por lesión.

En una transición, Modric hizo un cambio de orientación para descolocar a la defensa rival, Marcelo sacó un centro pasado y Karim Benzema anotó a placer de cabeza. Parecía un duelo sentenciado, pero la falta de comunicación entre Courtois y Varane le dio vida al PSG. Entre ambos no supieron despejar un centro desde la derecha y Kylian Mbappé solo la tuvo que empujar debajo del arco.

El PSG aprovechó esos minutos de desconcierto en el Real Madrid y Pablo Sarabia cogió un rebote para clavar un disparo al ángulo. El local hizo lo posible por la remontada, pero se quedó corto y la suerte no estuvo de su lado: un remate de tiro libre de Gareth Bale se estrelló en el palo en la última del partido.

Aunque el empate sabe poco al Real Madrid, el juego desplegado da para la ilusión y confirma el ascenso futbolístico de un equipo que hasta hace pocas semanas parecía condenado a un cambio de mando. Solo queda seguir corrigiendo. El Real Madrid ha vuelto. Zidane lo ha vuelto a hacer.