En los últimos años, Call of Duty parece haberse recuperado de un periodo oscuro donde la saga ya estaba empezando a sentirse gastada. A 3 años de su estreno, Modern Warfare (2019) estableció las nuevas bases de cómo Activision empezaba a manejar de distinta forma una de sus franquicias más rentables.
30 millones de copias vendió hasta mayo de 2020, según reportes. Infinity Ward se había consagrado nuevamente como el estudio más importante de la saga Call of Duty. Sin embargo, no siempre fue así, y es que el estudio durante una época tuvo problemas para intentar volver a sorprender a la audiencia. No podemos culparlos, después de la trilogía de Modern Warfare (2007-2011) parecía difícil poder superarse.
Pese a ello, lo intentaron en 2013, presentando Call of Duty Ghosts, el juego que aparentemente iba a traer el cambio que tanto los seguidores de aquel entonces estaban demandando con tanto entusiasmo. En aquella época, ya estábamos entrando a una nueva generación de consolas (PS4, Xbox One), por lo que las expectativas eran enormes, ya que Activision empezaría a experimentar con un "nuevo" motor gráfico.
Los problemas con Call of Duty Ghosts arrancaron desde la presentación oficial del título cuando Activision aseguraba que para la nueva generación de consolas, tendríamos un nuevo motor desarrollado internamente. No obstante, a las finales terminó descubriéndose que era el motor que se había utilizado en anteriores entregas solo que con "actualizaciones significativas".
El juego iba a marcar el inicio de una nueva saga, e iba a incluir novedades muy llamativas como la destrucción de entornos o terremotos, pero lo que más llamó la atención fue incluir a un perro como compañero llamado "Riley". La historia se centraba en un mundo azotado por la guerra entre naciones, viendo a un grupo de fuerzas especiales conocidas como "Ghosts", quienes deberán detener a su ex-líder, que ha pasado a formar parte de la "Federation", un grupo dispuesto a dejar al mundo en total caos y destrucción, aniquilando varias zonas de Estados Unidos.
Call of Duty Ghosts seguía la tradición de la saga de darnos momentos de acción sin cuartel, combatiendo en distintas zonas, y presentándonos a este grupo de soldados interpretados por actores ampliamente conocidos como Stephen Lang o Brandon Routh. Ni teniendo a Stephen Gaghan, escritor y ganador de un Oscar por la película "Traffic", no se tuvo bien claro qué era lo que realmente se quería contar, además de que los personajes terminaban siendo olvidables.
Cuando probabas por primera vez Ghosts sentías que esto ya lo habías visto mucho en Modern Warfare, y que, más allá de poder controlar al perro Riley en cierto punto, no había nada por donde agarrarte de sorpresa.
Conversando con Fernando Chuquillanqui, periodista del blog Más Consolas y jugador de Call of Duty, él considera que uno de los principales fallos del juego fue que en Infinity Ward ya no estaba la gente que desarrolló Modern Warfare y Modern Warfare 2.
Además, el propio nombre logró confundir a los jugadores por esta razón: "Se pensaba que estábamos ante una continuación de MW, lo cual no fue así. Creo que también influyó el haber llegado en la transición entre generaciones de consolas" expresó Chuquillanqui.
A ningún Call of Duty le puedes omitir sus componentes multijugador, y así tuvimos dos modos; el ya conocido juego en línea donde encuentras distintas modalidades para jugar con amigos o gente alrededor del mundo, así como "Extinction", el intento de replicar lo que funcionó con los zombis de Treyarch (Black Ops) pero cambiándolos por extraterrestres, una experiencia muy olvidable.
En cuanto al clásico multijugador, Infinity Ward quiso hacer un intentó de replicar lo que a DICE le estaba funcionando con Battlefield en cuestión de entornos y destrucción. Lamentablemente, el motor que tenía Ghosts no les permitía tan siquiera llegar a los estándares de la franquicia de Electronic Arts que aquel año venía de lucirse con Battlefield 3 y planeaba repetir lo mismo con BF4.
Aunque Ghosts haya tenido sus críticas, sorprende que encuentres en foros o grupos en redes sociales, usuarios que tienen cierto cariño, aguardando aún que Activision pueda encontrar una forma de hacerlo regresar. Respecto a un posible retorno de Call of Duty Ghosts, Chuquillanqui piensa que lo ideal sería un relanzamiento.
"Más que una continuación, me gustaría que primero llegue una remasterización o tal vez reiniciar la subsaga. A mí particularmente me gustaba el enfoque del multijugador, con mapas grandes. El problema fue que se mantenían los combates 6 contra 6; por lo que se sentían vacías las partidas. Hubiera sido genial partidas 10 contra 10; creo que eso habría generado mayor impacto" señaló.