Juan Rodríguez representa la influencia histórica y la diversidad cultural de los latinos en Nueva York desde sus primeros pasos migratorios.
La presencia latina en Nueva York tiene raíces que se extienden hasta principios del siglo XVII. En 1613, Juan Rodríguez, procedente de la República Dominicana, se convirtió en el primer latino en establecerse en esta zona. Su huella perdura hasta hoy: la ciudad le rinde homenaje con una calle que lleva su nombre en la icónica Avenida Broadway.
Juan Rodríguez llegó a Manhattan como miembro de la tripulación de un barco mercante holandés que recorría la costa norteamericana en busca de comercio y materias primas, según datos del Museum of the City of New York. Aunque el barco regresó a los Países Bajos, Rodríguez decidió quedarse y establecerse en la entonces Nueva Ámsterdam, llevando consigo algunos bienes comerciales.
Se cree que fue el primer inmigrante no indígena en habitar la región y que, un año después, ayudó al barco mercante a comunicarse con el pueblo indígena Munzee.
Rodríguez era un criollo mulato nacido en Santo Domingo, antigua La Española. En esa época, la mayoría de la población descendía de africanos traídos por España como esclavos. Aunque se desconoce gran parte de su vida en Nueva York, los historiadores del museo consideran que pudo haber pasado allí el resto de sus días.
El nombre de Juan Rodríguez pasó desapercibido hasta el siglo XXI. En 2012, un investigador del Instituto de Estudios Dominicanos de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) descubrió su historia en una revista portuguesa. Antes de esto, el historiador holandés Peter Hart había mencionado a Rodríguez en antiguos archivos, pero de manera breve.
Anthony Stevens-Acevedo, principal investigador del Proyecto Rodríguez, confirmó que Rodríguez emigró a Estados Unidos a los 18 años. Este hallazgo llevó al alcalde Michael Bloomberg a firmar una ley en 2012 que renombró un tramo de Broadway, desde la calle 159 hasta la 218, como Juan Rodríguez Way, con una ceremonia oficial para conmemorar el cambio.