La cervecera estadounidense lanza Utopias 2025, una edición limitada con un nivel de alcohol récord que ya ha sido vetada en múltiples territorios.
Algunas marcas saben que la polémica vende. Desde campañas controvertidas hasta productos “prohibidos”, generar ruido es una estrategia para captar atención. La última en hacerlo es Samuel Adams, que ha dado que hablar con Utopias 2025, una cerveza artesanal que alcanza un 30% de alcohol, muy por encima del promedio de esta bebida, que ronda el 5%. El resultado: su venta está prohibida en 15 estados de EE.UU., incluidos Alabama, Georgia, Carolina del Norte y Oregón.
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Utopias no es solo fuerte, sino también un objeto de coleccionista. Cada botella, numerada y envasada a mano en cerámica, se lanza cada dos años en cantidades limitadas y tiene un precio de 240 dólares, comparable al de algunos vinos de alta gama. Según Jim Koch, CEO de Samuel Adams, la propuesta busca explorar los límites de la cerveza artesanal: “Alcanzar el 30% de alcohol no es solo un número, sino la culminación de décadas de innovación, experimentación y colaboración. Cada botella ofrece una experiencia única y digna de colección”.
Además del alto contenido alcohólico, Utopias destaca por su complejidad aromática, adquirida tras su paso por barricas de whisky, cognac, scotch, whisky irlandés, ruby port, amarone y white port. La cervecera describe la bebida con notas de roble tostado, vainilla cálida, afrutado intenso y un toque dulce a miel, aunque la venta es limitada y los puntos de distribución no se revelan, aumentando su exclusividad.
Aunque Utopias es una de las cervezas más potentes de Estados Unidos, no es la más fuerte del mundo. Ese título lo ostenta Beithir Fire, elaborada en Escocia por 88 Brewery, con un 75% de alcohol, más que la mayoría de los whiskies. Su venta incluye advertencias extremas, limitando el consumo a 35 mililitros por ocasión, y su caducidad alcanza los 100 años, lo que la convierte en la cerveza con mayor longevidad en estantería a nivel global.