Un residente de Lewiston fue acusado de retener a una mujer contra su voluntad y amenazarla de muerte para obligarla a robar en un Walmart de Auburn.
Un sujeto de 50 años fue arrestado en la ciudad de Auburn tras protagonizar un preocupante suceso en una sucursal de Walmart en Estados Unidos. De acuerdo con los reportes policiales, el hombre habría obligado a una mujer, bajo amenazas de muerte, a participar en un intento de robo. Gracias a la rápida actuación del personal del establecimiento y de los agentes de seguridad, el sospechoso fue detenido antes de que ocurriera algo más grave.
De acuerdo con el medio local WGME CBS 13, una mujer de 30 años denunció el miércoles, alrededor de la 1:30 p.m., que fue obligada a subir a un vehículo y llevada, contra su voluntad, al Walmart USA de Auburn.
El presunto agresor, identificado como Harrison Coleman, de Lewiston, supuestamente amenazó con matarla si se negaba a robar determinados artículos del establecimiento. La policía indicó que la víctima conocía previamente al sospechoso.
Harrison Coleman, 50, de Lewiston
Una vez dentro del Walmart USA, la mujer logró pedir ayuda a los empleados, quienes actuaron rápidamente y alertaron a un oficial que prestaba servicio de seguridad en el lugar. Gracias a su rápida reacción, el agente intervino de inmediato y localizó a Coleman, quien esperaba en el estacionamiento dentro de su vehículo.
El subjefe de policía de Auburn, Tim Cougle, declaró a WGME CBS 13 que "la rápida actuación de los empleados de Walmart USA y la proximidad del agente que respondió inicialmente garantizaron la seguridad de la víctima y permitieron la rápida detención del sospechoso".
Las autoridades confirmaron que Coleman fue arrestado en el lugar y trasladado a la cárcel del condado de Androscoggin, donde permanece detenido sin derecho a fianza. El hombre enfrenta múltiples cargos, entre ellos:
Las autoridades informaron que Coleman fue detenido en el sitio.
Según la policía, el sospechoso agredió físicamente a la mujer antes de obligarla a subir al vehículo y llevarla hasta el establecimiento comercial.
La policía de Auburn continúa investigando el caso y reiteró su llamado a la comunidad para que reporte de inmediato cualquier comportamiento sospechoso o violento.