¡Buenas noticias, inmigrantes en Estados Unidos! Así pueden obtener asesoría legal de un abogado de inmigración

Presta atención, inmigrante en Estados Unidos. ¿Quieres ser ciudadano del país norteamericano? El primer paso es más sencillo de lo que parece, pero contar con el apoyo adecuado puede hacer toda la diferencia. Descubre cómo un abogado de inmigración puede facilitarte el camino hacia la ciudadanía americana y por qué podría ser tu mejor aliado en este proceso. Más detalles en esta nota.

Cuando decides contar con un abogado para tu proceso de naturalización, es fundamental que este profesional esté acreditado por la Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA). El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) exige que cualquier abogado que te represente en el trámite de ciudadanía esté debidamente autorizado.

Para formalizar esta relación, se debe presentar el Formulario G-28, que es la Notificación de Comparecencia como Abogado o Representante Acreditado, junto con el Formulario N-400 (solicitud de naturalización). Una vez aprobada tu solicitud, el abogado podrá actuar en tu nombre ante USCIS, manejando todos los trámites necesarios hasta que llegue el momento de los exámenes de inglés y cívica. En la última etapa, el abogado te representará hasta la ceremonia de juramentación, donde se otorgará tu ciudadanía.

Contar con un abogado especializado en inmigración ofrece varios beneficios cruciales durante todo el proceso de naturalización. Primero, puede ayudarte a comprender y completar correctamente los formularios requeridos, evitando errores que puedan retrasar tu solicitud o generar problemas con USCIS. Además, te asesora sobre las mejores estrategias en caso de que enfrentes obstáculos, como antecedentes penales o problemas migratorios previos, lo que puede aumentar tus probabilidades de éxito.

Otro beneficio es que tener un abogado significa que tendrás un experto que te representará en todas las interacciones con USCIS, ahorrándote tiempo y reduciendo el estrés. También puede ayudarte a organizar y preparar los documentos necesarios, asegurándose de que tu caso se presente de manera clara y sólida.

Por último, si surgen complicaciones o demoras en el proceso, sabrá cómo manejar los imprevistos de forma eficiente, protegiendo tus derechos en todo momento.